Una de las quejas habituales que UFP recibe de sus afiliados es la aleatoriedad que existe para solicitar la reposición de las prendas de uniformidad, tanto la ordinaria como la de las diferentes especialidades. La inexistencia de una norma sobre esta materia, en la que parece que se ha utilizado más algunas indicaciones verbales desde hace mucho tiempo, exige ya mismo que se apruebe una disposición clara que establezca cuándo y cómo cambiar las prendas que utilizamos. Lo mismo ocurre con algunos elementos (como los cascos de motorista, de los que no sabemos el periodo de vida útil y cuántos lo han sobrepasado) o con el procedimiento empleado para pedir el cambio de prendas deterioradas (minuta).
La mejor forma de evitar peligros en nuestra profesión por el deterioro de la uniformidad es determinar con claridad cuál es el periodo de tiempo necesario para la reposición de las prendas y cuántas corresponden a cada funcionario, haciendo extensiva esta necesidad a especialidades como Caballería o Motos. Dejar por escrito con claridad cómo y cuándo proceder. Porque UFP siempre apuesta por la seguridad en tu trabajo, reclamando mejoras.
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