Tanto en el Pleno del Consejo de la Policía del pasado día 5 de abril de 2013, como ayer en reunión con el Comisario General de Seguridad Ciudadana y el Jefe de las Unidades de Intervención Policial, la UNIÓN FEDERAL DE POLICÍA dijo un NO rotundo a la colocación de un número orgánico individual a la espalda de los policías integrantes de la UIP.
Pero un NO en cualquiera de los supuestos y con las condiciones que quieran establecer.
Hay muchísimos motivos:
1. No hay un clamor social que demande este asunto. Resulta que los únicos ciudadanos interesados son aquellos integrantes de grupos radicales o antisistema que en concierto con abogados afines se dedican a denunciar vilmente a funcionarios policiales. O aquellos otros que desatan campañas nauseabundas utilizando la foto de policías por internet, llegando a perseguir a sus hijos en el colegio al que acuden.
2. Las Unidades de Intervención Policial no cometen abusos. Sus actuaciones suelen ser impecables con poquísimas excepciones individuales.
3. No existe la impunidad en las Unidades. Todos los funcionarios van identificados y no hay un solo suceso en los últimos tiempos que la DGP, la CGSC o la JUIP haya querido reprochar disciplinariamente y no haya podido por no poder identificar al funcionario. Ni uno.
4. No podemos “criminalizar” a los policías integrantes de las Unidades, portando un número identificativo en su espalda que ningún otro componente policial porta, ni ninguna otra Fuerza y Cuerpo de Seguridad lleva (con excepción de los Mossos que han comenzado ahora).
5. Existe un riesgo real de que cualquier policía sufra las consecuencias jurídicas de una mala decisión política o de algún alto mando policial.
6. Más importante que el número es la carencia de instrucciones y protocolos de actuación. Años llevamos reclamándolos.
7. No ha existido nunca, a pesar de que la UFP lleva solicitando insistentemente mucho tiempo, voluntad política de perseguir las continuas y reiteradas denuncias judiciales falsas que se interponen contra policías. Ni de perseguir las campañas por internet contra los policías. Ni de utilizar los Gabinetes de prensa para informar a la ciudadanía y los medios de comunicación sobre el trabajo de las Unidades y la falsedad que, en ocasiones, se divulga.
Y no se necesita ninguna normativa más, lo único que se necesita es VOLUNTAD, para que el fiscal correspondiente, el juez de oficio o los Servicios jurídicos de la DGP o del Estado, que para eso están, reclamen las correspondientes actuaciones contra todo aquel que denuncia falsamente a un funcionario policial o participe en las campañas contra policías por internet.
8. Para decidir la colocación del número, desde luego tiene que pasar el trámite del Consejo de Policía, realizar las correspondientes modificaciones normativas e, incluso, pasar el asunto por la Comisión de Riesgos Laborales.
El Comisario General reconoció que alguien no ha hecho bien las cosas en todo este asunto. Y que debido a eso hay muchísimas Unidades con el número ya instalado con remaches. Y el arrancar temporalmente ese número hasta el próximo Consejo de la Policía, podría ocasionar que las Unidades salieran a sus intervenciones sin chaleco antitrauma. Ante este escenario, por supuesto que la UFP no puede permitir que la integridad física de los funcionarios también se ponga en riesgo, por lo que en un ejercicio de responsabilidad, se ha transigido hasta el próximo Consejo que se han comprometido a instar su convocatoria lo antes posibles (15 días aproximadamente), donde lucharemos, que no tenga duda nadie, para que arranquen definitivamente los números de los chalecos donde nunca tuvieron que estar. Ya de forma ordenada y sin que ningún policía tenga que salir a la calle sin anti-trauma.
Podríamos aportar 30 motivos más, pero creemos que son suficientes. El portavoz de este sindicato jamás ha dicho que la UIP ha entrado en la Estación de Atocha infundiendo terror. Jamás se ha apoyado a Delegados/as del Gobierno que han tomado malas decisiones en momentos puntuales y las cuales han sufrido posteriormente los policías. Tampoco hemos dicho que queremos que el policía lleve el número identificativo bien grande y en el pecho. Y jamás ha tratado de jubilar a funcionarios policiales autores de delitos dolosos muy graves. Cada uno es responsable de lo que hace, y debe pagar por ello. Y todos, todos los funcionarios policiales estamos ya suficientemente identificados.
Lo que queremos es que los políticos no se escondan detrás del número de los policías.
COMITÉ EJECUTIVO FEDERAL
UNIÓN FEDERAL DE POLICÍA
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