En el día de ayer, 9 de mayo, tal y como os hemos informado, mantuvimos una reunión con el Secretario de Estado de Seguridad en el que le expusimos los posicionamientos fundamentales de nuestra organización en las cuestiones competenciales que son de su incumbencia.
Hemos definido al Cuerpo Nacional de Policía como una corporación democrática, que cree en ella y la defiende, y leal a las instituciones del Estado, a los órganos y a las normas legales emanadas de ellos. Que la política de los hechos consumados, cuando no nos gusta una norma, no va con nosotros y que son los legisladores los que deben adaptarlas (léase la L.O. 2/86) a las realidades sociales imperantes en cada momento. No estamos en contra de la adecuación de los operadores de seguridad a esta realidad pero nos oponemos frontalmente a la invasión competencial de otros cuerpos que por intereses espurios o políticos están llevando a cabo.
No necesitamos liturgias castrenses, desfiles militares o formaciones soldadescas para el reconocimiento social siendo el servicio a los ciudadanos y el trabajo diario nuestro único acicate.
Pero en estos últimos meses hemos sufrido invasiones competenciales, deslealtades de responsables de otros cuerpos o movimientos políticos para desvestir al Cuerpo Nacional de Policía de unas atribuciones que les reconoce la Ley Orgánica de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. Ejemplos de ellos puedes ser:
1. Se exigió al CNP y a la Guardia Civil una reducción del 25% de efectivos en los servicios policiales de Presidencia del Gobierno. El CNP ha cumplido y los responsables de la Guardia Civil NO, llegando la minoración sólo al 3%, con lo que invierte una paridad reconocida legalmente.
2. El Ayuntamiento de Santa Lucía de Tirajana (Las Palmas) cedió un terreno para el establecimiento de una Comisaría del CNP. Las instalaciones, recepcionadas por la Secretaría de Estado, han sido cedidas en un 86% a la Guardia Civil y un 14 para el CNP.
3. El incidente de la embajada de Francia en Madrid, donde el responsable de la Guardia Civil desobedeció a la Delegada del Gobierno cuando apareció una sustancia sospechosa y esta atribuyó la investigación al CNP tal y como establece la 2/86. El mando de la Guardia Civil dijo que sólo obedecía a su coronel. Posteriormente el responsable de la zona MILITAR de la Guardia Civil, por escrito, se jactó y felicitó por ese comportamiento e invitó a otros miembros a imitar al insurrecto.
4. El intento de la Guardia Civil de repartir los servicios policiales de las embajadas de España en el extranjero invadiendo la clara competencia que sobre ese tipo de servicios tiene el Cuerpo Nacional de Policía.
5. La asunción de la Guardia Civil de competencias en materia de extranjería e inmigración contraviniendo claramente el marco legal de la L.O. 2/86.
6. El establecimiento de controles de seguridad ciudadana o el patrullaje en el puerto de Algeciras, experiencia piloto, al parecer, para extender su territorio competencial.
7. Y por último, el intento de algún jefe de la Guardia Civil, responsable de una cápsula de seguridad de un diputado, de acceder a la reunión plenaria del Congreso de los Diputados, no sabemos si por exceso de celo o para emular a algún coronel bigotudo.
Y todo lo anterior, con el consiguiente abandono del campo y sus pueblos (estos sí es su competencia), la toma de la capital de España por 15.000 guardias civiles que no sabemos lo que hacen, ya que la Seguridad Ciudadana y el resto de servicios policiales es legal competencia de la Policía Nacional.
Sabemos que no ayuda mucho, ciertos comportamientos y declaraciones de responsables sindicales del CNP entregando informes fantasma, diciendo que sobran 75.000 policías, que el gobierno quiere un muerto en la calle, etc, pero quiero recordarle que la mayoría de los Policías Nacionales creemos en este Cuerpo, en la democracia y en las leyes que la sustentan.
Hemos tenido un proceso regulador en el Cuerpo Nacional de Policía que en algunos casos hemos decidido que sigue el trámite parlamentario, otros hemos dicho que no y en otras estamos a la espera de las modificaciones que la Unión Federal de Policía cree imprescindibles.
Cronológicamente empezamos con la ley de Personal a la que dimos un sí condicionado para aportar nuestras mejoras en el trámite parlamentario. Ahora mismo el texto se encuentra en el entramado burocrático de la administración y una vez superado el mismo se remitirá al Congreso de la Diputados. La UFP dirá NO si no contempla:
- Una única vía de entrada por la escala básica y dos velocidades de promoción según se tenga o no la titulación correspondiente.
- Libertad de Residencia. Trabajar y vivir en el lugar que uno elija tal y como establece el EBEP.
- Reconocimiento de las parejas de hecho para el disfrute de determinados derechos reconocidos en el EBEP.
- Reconocimiento de la formación impartida en el CNP según el Sistema General del Ministerio de Educación.
- Ascenso a Oficial de Policía por antigüedad selectiva y concurso oposición.
- Nueva categoría de Subinspector Jefe sin que suponga traslado, conlleve incremento retributivo y posibilidad de ascenso a la Escala Ejecutiva desde cualquier de las dos categorías de la Escala de Subinspección.
En la regulación de los sindicatos, asumimos que debíamos reducir el número de liberaciones (lo hicimos de manera previa y voluntaria) pero dijimos que NO a la misma, porque la misma suponía una tentativa de injerencia en la actividad sindical. No obstante a propuesta de la UFP se estableció seguridad jurídica a los representantes sindicales que eran liberados para el ejercicio de la actividad sindical para asistir a reuniones, siendo las mismas gestionadas por la propia organizaciones que tenía un cupo limitado acorde a la media total de afiliados anual.
En la normativa sobre el ingreso en la Orden al Mérito Policial, la UFP dio un SI condicionado a la misma en un proceso que clarificaba la concesión de unas medallas que habían (y en algunos casos continúan) sido utilizadas para premiar a amigos, afinidades y/o afiliaciones. La condición era la regulación de las felicitaciones y que la Dirección General se comprometió a realizar. A día de hoy todo continúa igual y la normalización de esa etapa inicial no se ha producido por lo que se siguen “fabricando” carreras policiales que al final desembocan en medallas blancas o pensionadas. Añadiendo a lo anterior, la opacidad de algunos responsables de Comisarías que no se han enterado de que hay que informar previamente a las organizaciones sindicales de las propuestas de medallas, la UFP está francamente decepcionada por este proceso.
Sobre la grabación del número de identificación en las Unidades de Intervención Policial dimos un NO rotundo al mismo, al considerar que era un intento de criminalizar a los integrantes del Cuerpo Nacional de Policía, y concretamente a los miembros de la UIP que, ni han tenido excesivos reproches judiciales o disciplinarios en una frenética actividad desarrollada a los largo de estos últimos años. El hecho de no incluir a otras fuerzas y cuerpos de seguridad o no ser un clamor popular más allá de grupúsculos radicales antisistema, no ayudó mucho para dar una respuesta afirmativa a una norma que intenta esconder la falta de decisiones políticas y protocolos de actuación en la responsabilidad individual de los policías que, no olvidemos actúan de manera colectiva.
La normativa de uniformidad y saludo nos parece una norma caprichosa y militarista que la Unión Federal de Policía no acepta y que en el caso que conculque derechos reconocidos en la Constitución Española como el de igualdad o que suponga un alejamiento de la sociedad con exigencias de corte de pelo militares, ausencia de pelo largo o prohibición de tatuajes, piercing, etc diremos NO y recurriremos ante los tribunales.
Las liturgias de formaciones, desfiles y paradas militares tampoco es una vocación de los policías que no aceptamos. No necesitamos reconocimientos a través de liturgias militares que nunca hemos tenido en el CNP.
Seguiremos informando.
Madrid, a 10 de mayo de 2.013
COMITÉ EJECUTIVO FEDERAL
UNIÓN FEDERAL DE POLICÍA
No hay comentarios:
Publicar un comentario