18 de abril de 2015
Por parte del ministro del Interior del D.G. de la Guardia Civil
EL pasado jueves, el Ministro del Interior, el director general de la Guardia Civil y el Director Adjunto Operativo de ese mismo cuerpo, se trasladaron desde Madrid a Murcia para ofrecer una rueda de prensa para aportar datos de la buena marcha del “Plan ROCA” en aquella comunidad. Recordamos que el Plan ROCA se establece debido al incremento de hechos delictivos que se producen en las zonas rurales, ámbito de competencia de la Guardia Civil.
Nada que decir de esa visita, si no fuera porque para su traslado se utilizaron asignados al Cuerpo Nacional de Policía y destinados a otros menesteres que no son precisamente el traslado del Ministro y su séquito, para lo que ya cuentan con aeronaves específicas a su disposición. Dicho de otro modo, disponen de aviones oficiales.
El avión utilizado para el traslado es una aeronave intervenida por la Policía en el marco de una operación contra el narcotráfico y el Juez que lleva el caso, en aplicación de la Ley, ha asignado este aparato para trabajar en la lucha contra el tráfico de drogas y no para el traslado de personalidades en viajes oficiales.
Este avión es utilizado para trasladar a los GEOs cuando tienen que desplazarse para el abordaje de un barco cargado de droga en altamar o más recientemente para enviar un equipo de salvamento a Marruecos a rescatar a varios espeleólogos españoles.
No es por tanto de recibo, que el Ministro y los mandos de la Guardia Civil utilicen estos medios a su antojo cuando disponen de otros oficiales y cuando, por ejemplo la Guardia Civil, se ha negado en muchas ocasiones a facilitar medios marítimos de los que dispone para que pudieran ser utilizados en servicios en altamar por el Cuerpo Nacional de Policía. Mientras tanto, el hasta hace unos días asesor del Secretario de Estado de Seguridad, Alejandro Sánchez, ha estado utilizando una vivienda de la Guardia Civil.
Si hubieran querido dar un buen uso a ese avión, el Ministro podría haberse desplazado a los funerales de nuestros últimos compañeros muertos en acto de servicio y en los que no hizo acto de presencia seguramente porque no eran rentables, políticamente hablando.
Esperemos que se tomen medidas para que este episodio no vuelva a repetirse y se respete nuestra Institución y se la deje de utilizar al antojo del Ministro de turno o de Cuerpos claramente favorecidos por estas decisiones.
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